Una goliza que se veía desde un principio, anotando Alemania desde el minuto 5 del partido, después 8 vino el segundo golpe alemán.
La selección mexicana se vio superada en todos los aspectos por los europeos, teniendo México por mucho tres oportinidades de visitar la portería contraria, para sacarse la espina al minuto 87 con un gol de Marco Fabián.
Los nacionales terminaron derrotados con 4 goles, que pudieron ser más, si no es por la suerte que tuvo Memo Ochoa.
Fuente: Staff
1 comentario
Así es, bien dicho, por suerte, porque la suerte es con todos los porteros, todos todos son buenos o malos en rachas de tiempo es la suerte lo que los acompaña, ninguno es mejor que otro, el que puede destacar en un partido al siguiente ya lo pueden estar aplastando con una goliza, ninguno se escapa de estas jugadas de la vida, memo no tuve tanta suerte, simplemente la suerte estuvo con el contratio y si hablamos de suertes es con todos los jugadores, así de sencillo.