Maestro Alfonso Zárate, los usos del poder, comentó que cuando poco a poco salió a la luz los horrores cometidos por el crimen organizado en el rancho Izaguirre, comunidad de la Estanzuela, municipio de Teuchitlán, Jalisco, primero pareció algo muy lejano cuando en realidad se localiza a 58 kilómetros del centro de la zona conurbada de Guadalajara. Pero al descubrir lo que sucedió en ese predio, donde además de ser un campo de entrenamiento para jóvenes cooptados por la delincuencia organizada, eso se convirtió en la peor expresión del horror en la historia reciente de México, espacio ese que, además de ser ignorado por las autoridades, se ha convertido en el más grave caso de exterminio de estos tiempos: más de 200 incinerados.