El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, ordenó este viernes a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ampliar la operación terrestre en Gaza, advirtiendo que, si Hamás no libera a los rehenes, Israel podría anexar permanentemente partes del enclave palestino.
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Más ataques y evacuaciones en Gaza
En su declaración, Katz instruyó al ejército a tomar más territorio y evacuar a sus habitantes para establecer zonas de seguridad. La ofensiva, denominada “Operación Fuerza y Espada”, incluirá ataques aéreos, navales y terrestres, además de medidas de presión como la evacuación de civiles hacia el sur del enclave.
El recrudecimiento de los combates ocurre tras la reanudación de los ataques israelíes hace tres días, rompiendo una tregua parcial vigente desde enero. Según cifras de la Defensa Civil de Gaza, al menos 504 personas han muerto, incluyendo 190 menores, en los bombardeos más intensos de los últimos meses.
Israel presiona por la liberación de rehenes
Katz reiteró que la única forma de frenar la expansión territorial de Israel en Gaza es la liberación de los 58 rehenes que Hamás aún mantiene en su poder. De estos, el ejército israelí considera que 34 han muerto.
Las operaciones militares también incluyen el bloqueo de la principal vía norte-sur de Gaza, dificultando la movilidad de los civiles.
Reacciones internacionales y protestas en Israel
El ataque ha generado críticas globales. El presidente ruso, Vladimir Putin, expresó su preocupación y ofreció ayuda para mediar en el conflicto. En contraste, la Casa Blanca reafirmó su respaldo a Israel, asegurando que el presidente Donald Trump apoya completamente la ofensiva.
Mientras tanto, miles de israelíes han salido a las calles de Jerusalén acusando al primer ministro Benjamin Netanyahu de poner en peligro la vida de los rehenes con la intensificación de la ofensiva.