En una reunión en Arabia Saudita, Estados Unidos y Rusia acordaron formar equipos de alto nivel para trabajar en una solución al conflicto en Ucrania, según confirmó el Departamento de Estado de EE. UU.
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Tras cuatro horas de conversaciones, el negociador ruso Yuri Ushakov calificó el diálogo como “muy serio”. Mientras tanto, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, exigió que la OTAN renuncie por completo a su promesa de admitir a Ucrania en el futuro, argumentando que el tema sigue afectando la estabilidad en Europa.
Sin embargo, la reunión generó preocupación entre Kiev y sus aliados europeos, quienes temen que el presidente Donald Trump pueda llegar a un acuerdo que favorezca a Moscú y comprometa la seguridad de Ucrania.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, insiste en que sin la participación de su país, no habrá un acuerdo legítimo, y continúa exigiendo la membresía en la OTAN como única garantía de soberanía ante Rusia.
Las negociaciones, facilitadas por Arabia Saudita, se dan en un contexto de endurecimiento de las demandas rusas y de un creciente esfuerzo de EE. UU. para poner fin a la guerra. Se espera que los nuevos equipos de negociación busquen una salida “duradera, sostenible y aceptable para todos los lados”, aunque el camino sigue siendo incierto.