Doctor Diego Valadés, investigador emérito del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, en entrevista con José Cárdenas, señaló que, desde la promulgación y publicación de la Reforma Judicial, se inicia un camino que prevé adverso para la democracia, el estado de derecho, y derechos humanos de los mexicanos. Añadió que ha expresado su solidaridad con los jueces y en general con el personal del Poder Judicial de la Federación, y su rechazo a la reforma. Mencionó que es evidente que se hubiera ganado la impugnación, también consideró evidente que no procedía aplicar un recurso como el de la impugnación cuando las pensiones que se dictaron carecían de fundamento constitucional y legal. Valadés destacó que, aunque la reforma tiene el potencial de modernizar el sistema, también presenta varios riesgos significativos. Según el abogado, uno de los mayores problemas radica en la posible concentración de poder que podría resultar de los cambios, minaría la independencia judicial y llevar a una menor transparencia en los procesos.