Maestro Alfonso Zárate, en los usos del poder, expresó que particularmente la alcaldía Cuauhtémoc, que comprende el Centro Histórico, constituyen una fuente casi inagotable de recursos ilegales. No hay necesidad de meterle mano al presupuesto, torrentes de dinero ilícito llegan hasta la oficina del alcalde. Para un alcalde corrupto, la Dirección Jurídica y de Gobierno es clave, por eso suele designar en esa área a su hombre de mayor confianza y aquí es relevante recordar que la madrugada del 16 de septiembre de 2016 fue detenido en un retén Pedro Pablo de Antuñano, quien ocultaba en una caja de cartón 600 mil pesos en efectivo cuyo origen no pudo explicar, era el director jurídico de la entonces Delegación Cuauhtémoc que encabezaba Ricardo Monreal Ávila. ¿Era la colecta de una semana o de cuántos días? Los argumentos del funcionario delegacional para su defensa fueron pueriles, pero en un sistema de procuración de justicia pervertido, no necesitó más para salir bien librado.