El cuerpo del magnate británico de la tecnología, Mike Lynch, fue encontrado el jueves por la mañana por submarinistas italianos entre los restos del lujoso superyate «Bayesian», que naufragó el lunes frente a las costas de Sicilia. Las autoridades italianas confirmaron que Lynch, de 59 años, es una de las víctimas mortales del trágico incidente, ocurrido a unos 50 metros de profundidad cerca de Palermo.
El miércoles, los equipos de rescate ya habían recuperado cuatro cuerpos entre los escombros del yate, y continuaron las labores de búsqueda para localizar a las dos personas que aún se encontraban desaparecidas. Finalmente, el jueves por la mañana, se encontró el cuerpo de Lynch, mientras que todavía permanece desaparecido el cadáver de una mujer, según confirmaron los guardacostas italianos.
El yate «Bayesian», construido por el astillero Perini Navi y propiedad de Lynch, se hundió rápidamente durante una tormenta, lo que ha generado interrogantes sobre las causas del naufragio. Aunque inicialmente se informó que el mástil de 75 metros de la embarcación se había roto, las nuevas investigaciones sugieren que esto podría no haber sido así. Las dudas se centran ahora en si la quilla lastrada del yate, que actúa como contrapeso del mástil, estaba correctamente posicionada en el momento del accidente.
Entre las personas rescatadas del naufragio se encontraban 15 sobrevivientes, incluyendo seis pasajeros. Sin embargo, otros seis individuos, incluyendo a Mike Lynch y su hija Hannah, fueron reportados como desaparecidos. Entre los desaparecidos se encontraban también el presidente de Morgan Stanley International, Jonathan Bloomer, y su esposa, así como el abogado Chris Morvillo, quien había representado a Lynch en su juicio en Estados Unidos, y su esposa.
Giovanni Costantino, director de The Italian Sea Group, empresa propietaria del astillero que construyó el «Bayesian», sugirió que el desastre podría haberse debido a errores humanos. En una entrevista con el diario Corriere della Sera, Costantino mencionó que el barco no debió haber estado fondeado durante la tormenta y que los pasajeros no deberían haber permanecido en sus camarotes. Según Costantino, un barco similar había resistido al huracán Katrina, insinuando que el «Bayesian» debería haber soportado la tormenta si las precauciones adecuadas hubieran sido tomadas.