Gerardo Fernández Noroña, en alta voz, comentó que es un golpe para el frente de derecha, donde Sheinbaum tiene el 58% y Gálvez el 34%. Esto a pesar de la guerra sucia que la oposición lanza a Morena. Es indiscutible la solidez de Sheinbaum, sin embargo, no hay que confiarse. La elección se gana con votos, no con encuestas.