Un tribunal español rechazó el argumento del exfutbolista brasileño Dani Alves de que había sufrido un juicio mediático y que se le debía dar más tiempo para preparar su proceso penal por presunta agresión sexual a una mujer en Barcelona en 2022.
El fiscal acusa a Alves de forzar a la mujer a mantener relaciones sexuales y de no utilizar preservativo, y solicita una pena de nueve años de prisión y que Alves pague una indemnización por daños y perjuicios de 150 mil euros (163 mil 215 dólares) a su presunta víctima.
Alves negó inicialmente haber mantenido relaciones sexuales con la mujer, a la que dijo no conocer. Más tarde sostuvo que sí que había mantenido relaciones sexuales consentidas con ella en el baño VIP de un club nocturno y que lo había negado en un principio para proteger su matrimonio.
El tribunal conformado por tres jueces, denegó una solicitud de suspensión del juicio presentada por la abogada de Alves, Inés Guardiola, alegando que no se le había dado tiempo suficiente para preparar su primer interrogatorio policial tras su detención y que había sufrido un juicio paralelo por los medios de comunicación.
Está previsto que el juicio frente Alves dure tres días. La presunta víctima testificó este lunes en una sesión a puerta cerrada. Habló desde detrás de un biombo, con la voz distorsionada para proteger su identidad. En total declararán 30 personas y Alves será el último en subir al estrado.