«La Guardia Civil detiene a tres tripulantes de la narcolancha que ayer embistió a una patrullera causando la muerte de dos agentes y provocó heridas a otros dos», en la bahía de Cádiz, indicó la fuerza de seguridad en un comunicado. «Otras dos personas que se habían desplazado en vehículo […] para recoger a los tripulantes» han sido igualmente detenidas, añade el comunicado.

Un vídeo publicado por la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) y por varios portales de prensa españoles muestra una persecución en el puerto entre varias embarcaciones en plena noche, en medio del oleaje provocado por los barcos. Uno de los dos guardias civiles heridos sigue hospitalizado, pero está fuera de peligro, precisó la Guardia Civil.

«Lamento profundamente la muerte de los agentes de la Guardia Civil en acto de servicio en la costa de Barbate», escribió el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, en la red social X el sábado.

Los miembros de la familia real también se mostraron en X «tremendamente apenados» por la muerte de los dos guardias civiles. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se desplazó al lugar y calificó los hechos de «asesinato». También prometió una «impunidad cero» y usar «todos los medios que sean necesarios» para luchar contra el narcotráfico en la región.

El gobierno del enclave británico de Gibraltar, cerca de la bahía de Cádiz, expresó también sus condolencias a los familiares de las víctimas en un comunicado.

La bahía de Cádiz es escenario habitual de incautaciones de droga por parte de los agentes de aduanas y las fuerzas de seguridad españolas. España es una de las rutas europeas de importación de droga, y la región de Andalucía, por su proximidad a Marruecos donde se produce la resina de cannabis, es una de sus puertas de entrada.

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