La directora del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Catherine Russel, denunció la «devastación» que presenció durante su visita a la Franja de Gaza, y pidió a las partes en conflicto que pongan «fin al horror» en el enclave palestino.
«Lo que vi y lo que es escuché fue devastador. Han soportado bombardeos constantes, pérdidas y desplazamientos. Dentro de la Franja no hay ningún lugar seguro para el millón de niños que viven» allí, afirmó Russell en un comunicado emitido tras su visita.
«Las partes en conflicto están cometiendo graves violaciones contra los niños», añadió. «Estas incluyen asesinatos, mutilaciones, secuestros, ataques a escuelas y hospitales, y la denegación de acceso humanitario, todo lo cual condena Unicef«.
Israel prometió destruir al grupo terrorista Hamas en respuesta a sus ataques del 7 de octubre, en los que, según afirma, murieron unas, mil 200 personas, en su mayoría civiles. Otras 239 personas fueron tomadas como rehenes.
El Ministerio de Sanidad de Gaza, dirigido por Hamas, afirma que los bombardeos aéreos y la ofensiva terrestre posteriores de Israel han matado a 11 mil 320 personas, también civiles en su mayoría.
Russell es una de las pocas funcionarias internacionales que han visitado la Franja de Gaza desde que comenzó la guerra tras un ataque sorpresa de Hamas.
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En la declaración pidió un «alto al fuego humanitario inmediato» y que se permita la ayuda sin restricciones. Reveló también que en el área «neonatal del hospital, los bebés se aferraban a la vida en incubadoras, mientras los médicos se preocupaban de cómo podrían mantener las máquinas sin combustible».
«Sólo las partes en conflicto pueden realmente poner fin a este horror», subrayó.