Alfonso Zárate, en los usos del poder, expresó que esta calamidad, del huracán Otis, que ha dejado un Acapulco roto, fracturado y que reclamara un esfuerzo de muchos meses y años para tratar de recuperar Acapulco. Esto admite una lectura de corte político que evidencia la ineptitud de las fuerzas armadas que tienen una responsabilidad mayor en distintos ámbitos. Ineptitud en el sentido de que el mismo día del huracán el presidente Andrés Manuel López Obrador dice que no tiene información por la falta de electricidad. Cuando ese no es el único sistema de comunicación, existe el satelital para informar oportunamente. Y la decisión de ir por vía terrestre fue una acción teatral que una decisión real porque decenas de helicópteros en la Sedena el cual pudo ser llevado a la zona del desastre y tener una visión panorámica.