Ricardo Monreal, a quema ropa, aseguró que la delincuencia organizada se ha convertido en un elefante, y es imposible invisibilizarlo u ocultarlo; por lo que se debe asumir y enfrentar, el senador hizo votos para que la delincuencia no traspase la frontera e invada la esfera electoral. Por ello, hizo votos para que el alto perfil de campañas negativas no traspase la frontera entre la virulencia política verbal y la violencia física. Confió en que, tanto los partidos como las y los candidatos tengan la civilidad de medir las consecuencias inesperadas de sus campañas negativas; la sabiduría para distinguir entre la libertad de expresión y el instinto a la agresión; entre civilidad y barbarie. Sobre todo, cuando el crimen organizado busca la ventana rota de las campañas electorales para infiltrarlas y dominarlas, alertó.