Estados Unidos parece abocado a un cierre de Gobierno que podría tener consecuencias económicas desastrosas, después de que el ala dura del Partido Republicano, afín al expresidente Donald Trump, impidiera este viernes la aprobación del último plan presentado por el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy.

El resultado de la votación fue de 198 votos a favor y 232 en contra, con la negativa a la aprobación tanto por parte de los republicanos leales a Trump como de los legisladores demócratas, opuestos al proyecto porque incluía recortes a la financiación de las agencias federales.

Los afines a Trump ya habían expresado su oposición a cualquier medida temporal para financiar a la Administración pública más allá de las 00.00 horas del domingo 1 de octubre, cuando se agotan los fondos disponibles.

La Casa Blanca advierte de que el cierre impactará la seguridad nacional

La Casa Blanca advirtió este viernes de que un cierre eventual de la Administración puede impactar en la habilidad del Gobierno para mantener la seguridad nacional, y lamentó que cientos de miles de trabajadores federales y de soldados estadounidenses puedan quedarse sin salario de forma indefinida.

Un cierre parcial de la Administración pública llevaría al cierre de la mayoría de las agencias gubernamentales, museos y parques nacionales. Esto provocaría además que 800 000 empleados federales y 1,3 millonesde militares en activo se quedaran temporalmente sin trabajo ni sueldo.

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