Carlos Marin, en los demonios andan sueltos, expresó que a seis meses del atentado contra Ciro fue mensaje de muerte o trató de arrebatarle la vida, se tienen las mismas interrogantes, las mismas dudas. A principios de enero la autoridad tenía presas a 12 personas que luego fueron 13. Entre ellas el supuesto autor de los disparos y sus cómplices materiales. Nadie dijo entonces ni lo dice hoy que ellos sean los autores intelectuales del atentado. Dicen que son la célula de ejecución, quizá lo sean, pero parecen la carne de cañón de siempre.