Terceras Home

Segunda llamada, segunda: Juan María Naveja

Publicado por
José Cárdenas

Juan María Naveja

 

 

Al atentado contra Ciro Gómez Leyva se ha venido agregando la serie de amenazas en contra de la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Lucía Piña, en el primer caso, afortunadamente, Ciro vive para contarlo, en el segundo hay quienes lo quieren minimizar; en ambos no creo que haya quien quiera estar en el pellejo de las víctimas, es terrible ir por la vida con las imágenes de una serie de disparos directos o en las que una representación de tu persona es incendiada.
No presidente López Obrador, Usted tiene responsabilidad en ambos casos porque tanto el periodista como la ministra sólo han cumplido con su trabajo y Usted no se ha parado de lanzar críticas y ofensas, las más de las veces sin sustento, solo porque tiene todo el poder del Estado a su disposición.
En el caso del periodista llegó al extremo de considerar un posible autoatentado: “No porque él se lo haya fabricado, sino porque alguien lo hizo para afectarnos a nosotros. No lo descarto”.
Pocos días después de la elección de la ministra Piña como presidenta de la Corte se lanzó con todo: “Apenas llegó la nueva presidenta y se desata una ola de resoluciones a favor de presuntos delincuentes”. “Antes cuando estaba Arturo Zaldívar había un poquito más de vigilancia sobre los jueces, se respetaba su autonomía”.
No es nuevo, desde hace tiempo se viene advirtiendo que las diatribas desde la tribuna presidencial han derivado en una división social, desde que se iniciaron las mañaneras, sin faltar ninguna, el mandatario dedica tiempo a ofender, tiene sus clientes, uno de ellos Ciro Gómez Leyva, la lista ya es larga: Claudio X. González, Felipe Calderón, Genaro García Luna, Lorenzo Córdova, Ciro Murayama, José Ramón Cossío, José Woldenberg, Enrique Krauze, Héctor Aguilar Camín, Carmen Aristegui, Joaquín López Dóriga y su némesis Carlos Loret de Mola; entre otros.
A la sociedad ya la dividió entre clasemedieros y pueblo, fifís y chairos, conservadores y transformadores. Su síntesis estás conmigo o estás contra mí.
Las instituciones, aun las más reputadas en el país, incluso en el mundo, las ha descalificado porque puede, INE, INAI, Cofece, UNAM, la CNH, entre otras; y todo porque no le gustan los contrapesos, le molesta tener que ajustarse al estado de derecho.
Para todos y contra todos tiene y la mayoría de las veces sin soporte, ya son dos casos llevados a instancias legales, la réplica de la senadora Xóchitl Gálvez y la demanda de la periodista Denise Dresser. Seguramente hay más ofendidos que se han quedado con las ganas.
Cuando ha sido interrogado al respecto lo rechaza: “Me acusan de polarizar, no es politizar, y no voy a dejar de hacerlo porque le conviene al pueblo”.
Ahora la agarró contra el Departamento de Estado de los Estados Unidos, a su estilo lo descalificó por el informe anual de los derechos humanos en el continente, que no dice ninguna mentira sobre la violencia en México, lo llamó departamentito; se lanzó en una defensa absurda y desinformada de Trump, no ha parado de chocar contra los legisladores. Este miércoles llegó la respuesta, el Senador Lindsey Graham preguntó al Secretario Blinken ¿Están los cárteles de la droga en control de parte de México? El funcionario más cercano a Biden contestó: CREO QUE ES JUSTO DECIR QUE SÍ.
Y no nos equivoquemos lo que dice y piensa Antony Blinken viene desde la Casa Blanca.

Compartir:
Compartir
Publicado por
José Cárdenas