En su visita a San Lázaro para la Reunión Ordinaria con los diputados federales, el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, habló sobre la “ejecución” de cinco jóvenes a manos de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).  

Aunque resaltó que la dependencia a su cargo se pronunciará hasta tener el informe de la investigación que se le encargó a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Alejandro Encinas recalcó que no se trató de un enfrentamiento armado, sino de una ejecución.

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“Tenemos que esperar a la investigación que se le solicitó a la CNDH, toda vez que no se trató de un enfrentamiento con los jóvenes, independientemente de quiénes eran, fueron ejecutados”, indicó el subsecretario.  

Estás declaraciones de Alejandro Encinas ocurren después de los cuestionamientos al papel de los elementos de la Sedena en el caso y tras los comentarios del presidente Andrés Manuel López Obrador respecto a que dos de los jóvenes asesinados pertenecían a una organización criminal.

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Sin abundar en el tema, el subsecretario de derechos humanos recalcó que hay elementos para determinar que los cinco jóvenes “no iban armados y que no había enfrentamiento”, por lo que los militares y su cadena de mando deberán enfrentar su responsabilidad por el delito que presuntamente cometieron.