Liz Truss presentó su renuncia como primera ministra de Reino Unido apenas 45 días después de su nombramiento.

Su programa económico hizo temblar a los mercados y dividió a su Partido Conservador.

«Dada la situación, no puedo cumplir con el mandato para el cual fui elegida por el Partido Conservador», declaró Truss, que se convirtió en el jefe del gobierno británico que menos tiempo pasó al mando del ejecutivo.

Truss precisó que un nuevo proceso de votación interna será organizado de aquí al final de la próxima semana para elegir a su reemplazo.

La decisión ya fue comunicada al rey Carlos III y llega un dia después de que Liz Truss aseguró ante los Comunes que era una «luchadora» y que no pensaba dejar el cargo a pesar de haberse visto forzada a prescindir de la práctica totalidad de su programa económico y de gobierno.

Liz Truss llevaba batallando por su supervivencia política desde que el 23 de septiembre, cuando lanzó un «minipresupuesto», un programa económico de grandes recortes fiscales sin financiación, que hizo temblar los mercados financieros.

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