Entre llantos y plegarias, Guatemala entierra a los primeros guatemaltecos que son repatriados de entre los 53 migrantes que murieron asfixiados de calor en un remolque en Estados Unidos el pasado mes de junio. En la tragedia murieron 21 personas de Guatemala.

Este es el primer funeral: el de Melvin Guachiac. El menor de 13 años fue enterrado en Tzucubal, su aldea natal. Una multitud de personas acudieron a arropar a la familia. El padre que estaba en situación irregular en Estados Unidos regresó para llorar la muerte de su hijo.

«Nos estamos consolando» con mi esposa, dijo a la AFP Casimiro Guachiac, padre de Melvin. Casimiro espera volver a Estados Unidos con una visa de trabajo temporal con apoyo ofrecido por la Cancillería local. Muchos pobladores del lugar viajan sin documentos guiados por traficantes conocidos como «coyotes», a los que se les llega a pagar hasta unos 14.000 dólares.

Los cuerpos de otros dos menores han regresado este sábado a la aldea. Todavía no se ha establecido fecha para la repatriación de los restos de los otros 18 guatemaltecos. En el camión abandonado en San Antonio en Texas se asfixiaron también migrantes de México y Honduras.