Una noche inolvidable en la que Mark Calaway por fin vio la luz sin tapujos luego de dar vida por 30 años al legendario Undertaker. Tomando su más que merecido lugar en el Salón de la Fama de WWE porque «nadie en la historia lo merece más que él «, dicho esto por Vince McMahon, el Hombre Muerto apareció de entre las penumbras para lo que se suponía era el punto final de su carrera.
Y decimos «suponía» porque pese a lo emotivo de su discurso, de la ovación de casi 10 minutos antes de que dijera sus primeras palabras ya en el estrado y de verse vulnerable como nunca antes con lágrimas, The Undertaker parece negarse a «descansar en paz» y cerró su discurso con la frase: «Nunca digas nunca».
WrestleMania 36 en el 2020 fue la última vez que el Fenómeno tuvo una lucha. Aquella vez le ganó a AJ Styles y llevó su impresionante récord a 25-2 en la Vitrina de los Inmortales. Poco después, WWE dedicó una serie documental a su más grande creación, en la que Calaway aseguró que no volvería a luchar, pero aparentemente al Hombre Muerto aún le queda una vida más.
El gran discurso de Undertaker en el Salón de la Fama
La estruendosa ovación y gritos de agradecimiento por 30 años de inmaculada carrera en WWE retrasaron 10 minutos el discurso del Demonio del Valle de la Muerte, pero la espera por supuesto que valió la pena, esta vez sin un guion que seguir o lucha por promocionar.
«Durante tres décadas oculté a Mark Calaway, pero esta noche en señal de respeto a todos ustedes, quiero presentarles al hombre debajo del sombrero negro y la capa. Estoy ante ustedes no como Undertaker, sino como alguien eternamente agradecido con ustedes que me aceptaron en sus vidas y me ayudaron en mis peores momentos«, mencionó el luchador oriundo de Texas.
El discurso de aceptación ante su inducción al Salón de la Fama se convirtió en una lección de vida. El Enterrador demostró un poco de ese liderazgo que le hace el gladiador más respetado en la historia de World Wrestling Entertainment (esto también dicho por Vince McMahon al momento de presentarlo), siendo aplaudido de pie incluso por sus colegas de la talla de Rey Mysterio, Triple H, Shawn Michales, Kane y Randy Orton en primera fila.
«Este negocio de la lucha libre me enseñó las más grandes lecciones de mi vida y quiero compartirlas con ustedes. Fue hasta los 20 años que me descubrí a mí mismo, mi pasión y lo que me hacía feliz. Hoy te pido que vivas por y para ti, nadie más, ni por tus padres porque nadie pisará tus huellas, es tu camino. Hay que ser agradecido y leal, trata a todos con el mismo respeto porque no eres más importante que nadie y nunca te conformes, siempre debes tener algo que te motive a seguir adelante«, dijo el Fenómeno.
Agradeciendo a sus padres, familiares, esposa, hijos y colegas luchadores, tras casi una hora compartiendo anécdotas y consejos de vida, The Undertaker presumió su anillo como miembro del Salón de la Fama de WWE, el lugar al que estaba predestinado, pero que él mismo en apariencia se niega a que sea su última morada.
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