El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió que el resurgimiento de la pandemia del covid-19 y la última variante, ómicron, han aumentado drásticamente la incertidumbre en torno a las perspectivas económicas mundiales y es probable que la inflación sea más alta durante más tiempo de lo que se pensaba.

La economista en jefe del FMI, Gita Gopinath, y Tobias Adrian, director de la División de Mercados Monetarios y de Capital del Fondo, precisaron que la solidez de la recuperación económica y la magnitud de las presiones inflacionarias subyacentes varían significativamente de un país a otro.

En consecuencia, las respuestas de política al aumento de los precios deben calibrarse en función de las circunstancias particulares de cada economía, ya que es probable que la inflación sea más alta durante más tiempo de lo que se pensaba, precisaron este viernes en un blog del organismo financiero internacional.

En un documento, el FMI refirió que el aumento de los precios de la energía y los alimentos ha provocado una mayor inflación en muchos países y estos factores globales pueden seguir incrementando la inflación en 2022, especialmente los altos precios de los alimentos básicos.

Añadió que esto tiene consecuencias particularmente negativas para los hogares de los países de bajos ingresos, donde alrededor de 40 por ciento del gasto en consumo se destina a alimentos.

No obstante, apuntó el organismo internacional, si bien es probable que la inflación se mantenga elevada hasta bien entrado el 2022 en varios países, las expectativas de inflación para el mediano y largo plazo se mantienen cercanas a los objetivos de política en la mayoría de las economías.

El FMI explicó que las expectativas apuntan a que el desajuste en la oferta y la demanda se atenúe con el tiempo, reduciendo algunas presiones sobre los precios.

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