Rusia impuso ayer a las empresas estadunidenses Google y Meta (casa matriz de Facebook) grandes multas, de 98 millones y 27 millones de dólares, respectivamente, por no haber eliminado contenidos “prohibidos”, una muestra más de la presión en aumento en este país sobre los gigantes digitales.
En un comunicado en su cuenta Telegram, el servicio de prensa de los tribunales de Moscú precisó que los gigantes californianos fueron hallados culpables de “reincidencia”, ya que no eliminaron de sus plataformas contenidos juzgados ilegales en Rusia.
El tribunal no detalló de qué contenidos se trataba.
El regulador de las telecomunicaciones ruso, Roskomnadzor, indicó que los contenidos prohibidos alimentan el “odio religioso”, brindan información “poco fiable” o peligrosa para los menores, o apoya a “organizaciones terroristas o extremistas”.
“Vamos a estudiar los documentos del tribunal para decidir las medidas a adoptar”, afirmó el servicio de prensa de Google (filial de Alphabet Inc.), sin añadir nada más.
Rusia sanciona habitualmente a las empresas digitales acusadas de no borrar contenidos que hacen apología de drogas, suicidio y relacionadas con la oposición política. Sin embargo, las multas contra Google y Metason tan altas que no tienen precedentes.
Según Roskomnadzor, Facebook e Instagram(también propiedad de Meta) cuentan todavía con más de dos mil contenidos prohibidos en Rusia. Para Google, hay más de 2 mil 600.