El efecto que vive la ciudad estadounidense es conocido como “noche polar” y es provocado por la inclinación del eje de la Tierra, por lo que, en invierno, el Sol no alcanza a llegar a las regiones más cercanas a los polos del planeta y su luz no se puede ver en el horizonte por semanas.
Otro de los efectos durante esta época del año es que la temperatura en los polos terrestres desciende hasta los -20 grados Celsius; las personas que viven en Utqiagvik suelen continuar con sus actividades cotidianas, aunque permanecen más tiempo en sus hogares para protegerse del clima extremo.
TE PUEDE INTERESAR: