La primera aspirante a la vicepresidencia de Nicaragua, quien se registró para el proceso del próximo 7 de noviembre, fue detenida e inhibida para participar en las elecciones, con lo que la Policía de Daniel Ortega sigue la cacería de opositores.

Horas después de que fuera denunciada por supuesta apología del delito, la candidata de la Alianza Ciudadanos por la Libertad (CxLibertad) fue capturada y permanecerá bajo arresto domiciliario, según la notificación de las autoridades.

A través de redes sociales la CxLibertad acusó que autoridades judiciales del Ministerio Público y la Policía de Nicaragua acudieron a la vivienda de la opositora para retenerla de manera «arbitraria».

“Exigimos libertad y respeto a los derechos humanos de Berenice Quezada”, expresó después de dar a conocer la noticia y detallar que la exmiss se encuentra incomunicada, como ha ocurrido con otros aspirantes a la presidencia, activistas y disidentes, algunos que llevan más de un mes aprehendidos.

Medios locales reportaron que Quezada fue denunciada por Víctimas y familiares de la violencia terrorista de 2018 por presunta apología del delito ante la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH).

De acuerdo con la organización, las declaraciones de la aspirante opositora durante su registro en el proceso electoral «incitaron al odio».

Asimismo, acusaron que en su mensaje intento llamar a un nuevo “derramamiento de sangre” como ocurrió hace tres años, cuando se registraron las mayores movilizaciones contra el régimen nicaragüense.

Por lo anterior, integrantes del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y aliados de Ortega, solicitaron inhibirla del proceso electoral, en la misma semana que se registró como aspirante al cargo que ocupa actualmente la esposa del presidente, Rosario Murillo.