Residentes de zonas afectadas por los incendios en Grecia montaron guardias de 24 horas el martes para tratar de salvar sus hogares del fuego que sigue asolando la isla de Eubea, mientras el gobierno defiende su gestión de la crisis.
Los equipos de bomberos se preparaban este martes para un aumento de los vientos, lo que podría intensificar los incendios en la segunda isla más grande de Grecia, donde las llamas ardían por octavo día consecutivo.
También podrían reavivarse otros frentes en el Peloponeso.
El gobierno tenía previsto anunciar medidas de ayuda para los que han perdido casas y propiedades, pero para algunos habitantes dejar sus casas a las llamas que tiñen el cielo de un rojo intenso no era una opción.