El Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo esta mañana que las muertes por COVID-19 en personas ya vacunadas no representan un porcentaje alto y “no es un caso grave”.
Estos fallecimientos que se han reportado en distintas partes de la República.
En su tradicional encuentro matutino con la prensa, explicó que Hugo López-Gatell Ramírez, Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, se dedica a hacer una evaluación caso por caso. También destacó que ahora con los repuntes del nuevo coronavirus en algunos estados, se han dado a la tarea de revisar la información.
Desde Palacio Nacional, dijo que el tema es lo mismo que ocurre en el caso del regreso a las clases presenciales con el semáforo epidemiológico en color verde, ya que son mínimos los contagios que se han presentado.
Personas que ya han sido vacunadas contra la COVID-19 —algunas incluso con el esquema de dos vacunas completo— han enfermado y muerto en al menos ocho entidades del país, una situación que ha generado alarma mientras la inoculación avanza a lo largo del territorio a seis meses de haber iniciado con la meta de volver a la vieja normalidad.
Tan sólo en la última semana se registraron casos en Michoacán, Nuevo León, San Luis Potosí y Sonora, así como la confirmación por parte de las autoridades sanitarias de Hidalgo del deceso de 36 personas que ya habían sido vacunadas con al menos una dosis.
Fuente: MSN / Staff
1 comentario
«No es grave»… De seguro, la muerte, para el Sr. Presidente López, tiene remedio…..