Desde su construcción, las fallas en la Línea 12 han ocasionado problemas, cierres y ahora una tragedia.
El accidente ocurrido la noche del lunes 3 de mayo dejó un saldo preliminar de 23 personas muertas y 79 lesionadas, según cifras oficiales.
Tras los hechos, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, dijo que se realizarán peritajes para conocer las causas del accidente en la Línea Dorada.
“Se van a hacer todas las investigaciones hasta saber realmente cuáles son las causas y, por el momento a lo que estamos dedicados es a la atención de las personas que han sido trasladadas a hospitales”, dijo durante las primeras horas de este miércoles.
Desde su inauguración, el 30 de octubre de 2012, la también conocida como Línea Dorada ha enfrentado diversos problemas, que incluso han obligado a suspender su servicio.
El primer problema con la Línea 12 —que consta de 20 estaciones, entre ellas cuatro de correspondencia, distribuidas a los largo de 23 kilómetros— fue su costo.
Construida cuando Marcelo Ebrard era jefe de Gobierno, las obras costaron 26 mil millones de pesos, 70% más del monto original.
Un consorcio integrado por las constructoras ICA, Carso y Alstom se encargó de los trabajos de construcción.
Tras su inauguración y hasta el 23 de noviembre del mismo año, se reportaron 66 fallas en la Línea 12.
Los problemas afectaban instalaciones fijas y a los trenes.
Año y medio después, en marzo de 2014, se reportó desgaste prematuro en 12 de las 20 estaciones que conforman la Línea Dorada.
En el trayecto que va de Tláhuac y Atlalilco hubo desgaste ondulatorio en rieles, lo que provocó desniveles y alineaciones fuera de los parámetros normales.
Así lo dictaminó un reporte de la empresa alemana ILF Consulting Engineer, que analizó las fallas en la Línea 12.
El 11 de marzo de 2014, el Metro suspendió el servicio en 12 de las estaciones debido a “problemas de construcción”.
La suspensión sería por seis meses o hasta que se realizaran los “estudios, correcciones y mantenimiento necesarios para resguardar a los usuarios”.
En aquel entonces, Joel Ortega, director del Metro, explicó que las fallas en la Línea 12 “ya estaban presentes desde la apertura, pero se agudizaron en el tiempo y llegaron a un grado mayor de complicación cuando entraron la totalidad de trenes a operar”.
Luego del sismo del 19S, vecinos de la Línea Dorada denunciaron la aparición de grietas en las estructuras del Metro, de acuerdo con un reporte de El Universal.
En su momento, el Metro confirmó que había daño estructural en una de las columnas del tramo elevado entre las estaciones Olivos, donde ocurrió el siniestro de este 3 de mayo, y Nopalera.
“Hay un daño en el corazón de esta estructura ubicada en el tramo Nopalera-Olivos lo que debilita su funcionamiento integral en el soporte de peso y de elasticidad”, informó el Metro en ese entonces.
Jorge Gaviño, entonces director general del Metro, confirmó el 9 de enero de 2018, que los trabajos de reforzamiento de estructuras dañadas habían concluido.
“Gaviño Ambriz explicó que luego del sismo del 19 de septiembre del año pasado, las labores realizadas en esos puntos de la Línea 12, garantizan e incluso ‘queda sobrado’, el reforzamiento de las estructuras atendidas”, señalaron las autoridades en un comunicado.
A más de tres años de que se realizaron trabajos de reforzamiento, una trabe de la Línea 12 se venció cuando un tren con pasajeros circulaba encima. Dos de los vagones del convoy cayeron sobre autos a la altura de la Estación Olivos, mientras que el resto del tren quedó suspendido.
Las autoridades señalaron que se enfocaron en la atención de víctimas, así como en trabajos de rescate, al tiempo que se realizan las primeras investigaciones.
En su cuenta de Twitter, el ahora canciller Marcelo Ebrard, lamentó la tragedia ocurrida, pidió una investigación para deslindar responsabilidades y se puso a disposición de las autoridades “para contribuir en todo lo que sea necesario”.
Fuente: Staff