A diez años del accidente radioactivo de Fukushima, el gobierno local prepara la liberación de aguas radioactivas al Océano Pacifico.
Fue el 11 de marzo de 2011, cuando un accidente nuclear afectó al puerto japones, tras un terremoto de 9 grados, provocando un tsunami en la región. Luego del accidente, autoridades tomaron la decisión de verter aguas contaminadas en el Océano, incluso se tiene registró que toneladas de agua fueron liberadas durante el accidente, así refiere Michio Aoyama, profesor de geociencia de radioisótopos en el Instituto de Radioactividad Ambiental.
Tras diez años del accidente nuclear, se ha tomado la decisión de nuevamente verter este tipo de aguas, sin importar el impacto que pudiera tener a corto, mediano o largo plazo, no solo en el ambiente sino en la salud humana.
Alrededor de 1 millón 200 mil toneladas de agua contaminada serán derramadas en el Océano Pacífico. Pese a que el plan aun no ha sido aprobado, la maquinaria burocrática del país planea hacerlo valido en un par de semanas.
El agua contaminada corresponde a mil tanques de la antigua central nuclear, sin embargo, esta cantidad ha aumentado debido a las lluvias y aguas subterráneas. Es por esto, que le gobierno local planea descargar el agua radioactiva al océano, ya que el limite de los contenedores podría sobrepasarse a mediados de 2022.
Fuente: Enfoque Noticias