La fila se alarga sobre las pistas de un aeropuerto abandonado de los suburbios de Helsinki, donde, para evitar un rebrote de covid-19, se aplica un sistema de votación desde el automóvil de cara a las elecciones locales finlandesas.
Aunque las escenas de ‘drive-in’ para hacerse las pruebas de diagnóstico con seguridad se incrementaron en el mundo, esta vez se trata de votar antes de las elecciones locales del 13 de junio.
Las formalidades y la cumplimentación de la papeleta se dieron muy bien. Y protegidos del covid», celebró Joukko Salminen, jubilado, desde el interior de su auto blanco.
Tras aplazar las elecciones de abril a junio por la pandemia, los responsables finlandeses buscaron formas de organizarla para que sea segura, con la posibilidad de votar dos semanas antes respetando el secreto del sufragio.
Instalamos pantallas que impiden ver el voto», explicó Vesa Kouvonkorpi, asesora del centro electoral que está en el viejo aeropuerto de Helsinki-Malmi.
Porque el automóvil equivale a la cabina electoral y la ley prohíbe que uno pueda ver lo que ocurre allí», comparó.
Los autos que esperan son dirigidos hacia tres filas, el conductor le da entonces al funcionario electoral sus papeles de identidad a cambio de la papeleta para rellenar.
Extrema derecha
El encargado se da la vuelta mientras el conductor llena su boletín de voto y lo pone en un sobre que da al responsable electoral, que lo sella y lo coloca en otro sobre.
Luego será enviado a la correspondiente comuna.
Como en la cabina electoral, una sola persona puede estar adentro, según la ley finlandesa.
A los eventuales pasajeros del vehículo se les pide salir por un momento.
Aunque el proceso dura cuatro veces más que el voto normal, el puesto de votación es un éxito con más de 500 electores el primer día, según Vesa Kouvonkorpi.
El vasto espacio de la pista facilita que todo transcurra lejos de las molestias de los embotellamientos y del ejercicio del derecho a voto de las personas en cuarentena o aisladas, añade.
Con menos de mil muertes y 92 mil casos por 5.5 millones de habitantes, Finlandia muestra uno de los balances más bajos de la pandemia en Europa.
Las encuestas indican un avance de la oposición, especialmente la extrema derecha del Partido de los Finlandeses.
Para estas elecciones municipales, los electores deberán escoger entre 30 mil candidatos en 300 comunas.
El gobierno de centro izquierda de la joven primera ministra socialdemócrata Sanna Marin alcanzó niveles elevados de opiniones favorables para su gestión del covid.
Según la última encuesta difundida por la televisión pública Yle, este último partido obtendría 18.2% de los votos, lo que representaría un récord para esta formación nacionalista y un avance de cerca de 10 puntos con relación a las elecciones locales de 2017.
El resultado de su dirigente, Jussi Halla-aho, candidato a la alcaldía de Helsinki, se seguirá de cerca, aunque tenga pocas posibilidades de ganar la capital.
Fuente: Excélsior