Donald Trump seguirá impedido de publicar en Facebook, dictaminó este miércoles la junta independiente de supervisión de contenido de la compañía, lo que extendió el exilio del expresidente de los Estados Unidos de la red social más grande y lo dejó sin una de sus formas favoritas de llegar a sus partidarios e incitar a sus oponentes.
Facebook suspendió la cuenta de Trump después de que alentó a sus seguidores a marchar hacia el Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero en lo que se convirtió en un intento mortal de detener el conteo de votos del Colegio Electoral.
La prohibición fue originalmente temporal, pero se cambió a una suspensión indefinida al día siguiente. La decisión de la junta es vinculante.
Trump también está prohibido en Twitter, lo que significa que el presidente que usó las redes sociales para construir su primera campaña para un cargo público y que las empleó para insultar a los rivales, anunciar decisiones políticas importantes e impulsar la conversación nacional, debe emitir comunicados de prensa y sentarse para las entrevistas en la televisión conservadora.
Facebook había pedido a la junta de supervisión, un grupo independiente de académicos y abogados, que revisara su decisión de suspender a Trump y determinar si debería ser revocada.
La empresa se había comprometido previamente a actuar según la recomendación de la junta.
La decisión llega en un momento en que las plataformas de redes sociales enfrentan un escrutinio cada vez mayor por su manejo del contenido político y la desinformación, lo que ha llevado a los legisladores en Estados Unidos a analizar un preciado escudo de responsabilidad que protege a los gigantes tecnológicos de demandas por contenido publicado usuarios.
La medida, de solo 26 palabras conocida como Sección 230, ahora enfrenta su mayor revisión desde que se incluyó en la Ley de Decencia en las Comunicaciones de 1996. Los pedidos para revisarla aumentaron en los meses previos a las elecciones de noviembre y se intensificaron después del ataque que partidarios de Trump montaron sobre el Congreso.
Trump también fue expulsado de Twitter en enero, una medida que la compañía aseguró que es permanente. También fue bloqueado en Snapchat, YouTube y Twitch, entre otras redes, luego de los disturbios del Capitolio.
Perder el acceso a las redes sociales es un golpe político para Trump, especialmente desde Twitter, que era su medio favorito de comunicación y donde tenía 89 millones de seguidores, especialmente porque permaneció ‘en silencio’ en las semanas posteriores a su salida de la Presidencia.
Un regreso a las redes sociales le habría dado a Trump una plataforma más amplia, ya que se encuentra apoyando a los candidatos estatales y locales que le eran leales, y a aquellos que respalda para derrotar a sus compañeros republicanos que votaron que era culpable en el juicio político en su contra.
Trump también tiene la posibilidad de postularse para presidente nuevamente en 2024.
El exmandatario dijo en una entrevista el 29 de abril en Fox Business que estaba “considerando al 100 por ciento postularse nuevamente en 2024″. También dijo en el podcast Don Bongino Show, publicado el 28 de abril, que anunciará su decisión “probablemente justo después” de las elecciones intermedias de 2022.
Fuente: El Financiero