El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, declaró este martes el estado de calamidad pública en todo el territorio nacional debido a un brote de peste porcina africana, el primero que se detecta en los últimos dos años.
La medida estará vigente durante al menos un año a menos que sea levantada o extendida, dependiendo de la situación sanitaria. Además, permite a las distintas autoridades del país destinar los fondos adecuados para contener el virus, lo que incluye el Fondo de Respuesta Rápida.
En un mensaje difundido por la cadena de televisión ABS-CBN, el mandatario indicó que desde que se detectó la enfermedad por vez primera en 2019 se ha propagado a 12 regiones, 46 provincias, 493 ciudades y municipios y más de 2 mil 500 barrios.
Así, la población porcina se ha visto disminuida en unos 3 millones de cabezas, lo que ha supuesto una pérdida de unos 2 mil millones de euros.
Se trata de una enfermedad viral grave que afecta a los cerdos domésticos y salvajes. Se puede propagar a través de cerdos vivos o muertos y de los productos derivados, así como por medio de piensos y objetos contaminados como calzado, vestimentas, vehículos, cuchillos y equipos, entre otros.
No existe ninguna vacuna autorizada contra la peste porcina africana, a diferencia de la peste porcina clásica, causada por un virus diferente.
Históricamente, se han notificado brotes en África y partes de Europa, Sudamérica y el Caribe, si bien desde 2007 ha habido brotes en numerosos países de África, Asia y Europa, tanto en cerdos domésticos como salvajes. (Europa Press)