Que si la vacuna de Pfizer es eficaz al 90 por ciento, que si la de Johnson & Johnson sólo es eficaz al 65 por ciento con una sola dosis, con estos datos seguramente te has preguntado qué significa la eficacia de una vacuna y si eso puede determinar cuál es la mejor vacuna, que si es mejor la de Moderna que la de AstraZeneca.
En realidad, la eficacia de una vacuna no determina su efectividad o acaso cuando te vacunaron contra el sarampión le preguntaste a la enfermera de qué marca es esta vacuna o qué eficacia me dará, existe una mejor opción y es que en realidad el resultado de estos datos no importa mucho si conocemos el objetivo final: protegernos del covid-19.
Y a todo esto… ¿qué es la eficacia?
Como cada explicación de un concepto, hay que situarnos en el contexto. Las pruebas de una vacuna pasan por cuatro fases, en la cual en cada una se evalúan diferentes elementos como las dosis que se deben usar, la vía de administración, la producción de anticuerpos, entre otros.
Las fases de la vacuna
Fase I. Esta fase pretende evaluar la dosis que se debe usar y la vía de administración (la cual puede ser intradérmica, oral o intramuscular). En esta fase, el grupo es pequeño, menos de 100 personas.
Fase II. El objetivo de esta fase es conocer si la vacuna consiguió la protección, es decir, si hubo respuesta en la producción de anticuerpos. El grupo de voluntarios para esta fase aumenta de 200 a 500.
Fase III. En esta fase se pretende saber qué tan segura es la vacuna y la eficacia en un número mayor de personas involucradas en el estudio.
Es en la Fase 3 en donde se medirá qué tan segura es la vacuna y la eficacia de una vacuna, es decir, el porcentaje que vemos en los medios de comunicación y que puede cambiar constantemente, debido a que las vacunas siguen en estudio, por lo que es muy posible que se sigan viendo la aparición de nuevos datos que son cruciales.
Ahora sí, ¿cómo se mide la eficacia?
En la Fase 3 es en donde se estudian a más personas, es decir, habrá miles de participantes en los ensayos clínicos por lo que podría ser más probable determinar cuál es la eficacia de una vacuna.
El doctor Carlos Sandoval Jaime, quien es investigador del Instituto de Investigaciones de Biotecnología de la UNAM, además de miembro de la Sociedad Mexicana de Virología, explicó que en esta fase se toma un número muy grande de personas y se les administra de manera ciega, es decir, que ellos no saben si se les da un placebo o el candidato de vacuna ,y se les hace un seguimiento.
«Cuando se llega a un determinado tiempo o a un número de personas registradas se dice bueno pues ahora ya tenemos, por ejemplo, se vacunaron a 10 mil personas y 10 mil con placebo y después de unos meses o unas semanas la gente está reportando cómo se siente, si se infectaron o no y los investigadores lo evalúan y dicen tenemos 200 personas que están infectadas en este momento».
De esas 200 personas se abren los archivos, porque normalmente los médicos no saben si administraron el placebo o la vacuna y se determina a cuántas personas se les dio placebo y a quiénes se les aplicó la vacuna con esos números se determina la protección que tuvo su candidato a vacuna en relación al resto de la población.
«También se determina cuántos lamentablemente quizá murieron y llegaron a terapia intensiva, cuáles tuvieron síntomas muy leves y todo esto tiene una influencia en los estudios de seguridad de la vacuna, dijo el investigador».
¿Cuál es la mejor vacuna?
Debido a que la pandemia está cambiando conforme pasa el tiempo, es decir, se hacen nuevas mutaciones o variantes que pueden afectar al diseño de vacunas, es complicado determinar cuál es la mejor vacuna para combatir el covid-19; sin embargo, no hay que olvidar que todas cumplen con un objetivo: evitar que llegues a una sala de urgencias.
«Además están constantemente recibiendo nuevos datos, a lo mejor de estos primeros números que yo te conté 190 y 10, a lo mejor en la siguiente ronda hubo 160 y 40, eso ya cambia los números», comentó el investigador.
Fuente: Milenio