En el arranque de la vacunación contra el Covid-19 en la alcaldía Iztapalapa, la más poblada de las 16 demarcaciones de la Ciudad de México, miles de personas que acudieron a los ocho centros se olvidaron de la sana distancia, algunos llegaron sin registro y otros decidieron arribar horas antes de su cita, lo que generó largas filas que rodeaban los sitios de aplicación de la primera dosis de Sputnik V.
Ante esta situación, ocasionada principalmente por las personas que acudieron sin cita o se adelantaron a sus horarios, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, informó que ayer se vacunaría hasta el último adulto mayor de 60 años que estuviera formado. Sin embargo, recordó el esquema de la letra del primer apellido.
Cerca de las 8:30 horas, en la sede de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza, más de un centenar de personas ingresaron para ser las primeras en recibir la dosis, la gente felicitó a los organizadores por su trato.
En ese punto, los adultos mayores estaban sorprendidos de que no había filas y los trabajadores indicaron que la jornada comenzó sin contratiempos. Esto no ocurría en otras sedes, como en el Deportivo Santa Cruz Meyehualco, donde las filas alcanzaron hasta 1.5 kilómetros y no se respetaron los horarios de las citas.
“Yo no puedo caminar porque estoy enferma de la cadera, pero aún así me formé, pero los que dan el acceso hacen lo que les da la gana, nos dan una cita con un horario y a la mera hora, como se les acumuló la gente, dieron la indicación que ya no se respetaría el horario, iban a dejar ingresar como fueran llegando y no se vale, porque hay muchos que ni registrados están, que poca, deben estar al pendiente de eso”, reclamó Magdalena, vecina de la colonia Desarrollo Urbano Quetzalcóatl.
Ante las largas filas, los comerciantes aprovecharon la oportunidad de venta. Llegaron tamaleros, vendedores de jugos, hasta los que ofrecían plumas, libros de crucigramas y sopa de letras.
Aunque se avanzaba constantemente, la gente estuvo en las sedes más de una hora, desde el tiempo de espera para su ingreso, los minutos de registro, su vacunación y los 30 minutos de supervisión para ver si no generaba alguna reacción.
En la Vocacional 7, ubicada en avenida Ermita Iztapalapa esquina con avenida Jalisco, la situación era similar.
La gente fue llegando horas antes de su cita, pero ahí sí tuvieron que esperar hasta que fuera su turno, por lo que se registraron varias filas y la molestia de algunos.
En las instalaciones del Servicio de Transportes Eléctricos (STE), en Municipio Libre 402, en la colonia San Andrés Tetepilco, las filas eran largas, de acuerdo con el titular del STE y encargado de ese punto, Guillermo Calderón, pero fueron disminuyendo una vez que aumentó la capacidad de vacunación, pues pasaron de 400 dosis aplicadas en la primera hora, de las 8:30 a las 9:30 de la mañana; y después del mediodía ya se vacunaban a mil 100 personas.
Tranquilidad en Gustavo A. Madero
Sin contratiempos, y pese a ser la segunda alcaldía más poblada, comenzó la vacunación de adultos mayores en Gustavo A. Madero. El señor Enrique Carranza esperó una hora, llegó desde las 9:22 para aplicar su dosis y aseguró que la organización fue “espectacular”, que la gente y el Gobierno de la capital tenían todo muy controlado.
A través de sus redes sociales, la jefa de Gobierno dio a conocer que este Viernes Santo se aplicaron 140 mil 744 vacunas en las alcaldías Álvaro Obregón, Benito Juárez, Cuauhtémoc, Iztapalapa y Gustavo A. Madero, por lo que la Ciudad de México alcanzó un millón 31 mil 760 personas inmunizadas.
Fuentes: El Universal / La Razón