Rafael Cardona, en su Cristalazo, consideró poco probable que en Cuba se dé un cambio a corto plazo, pues la ideología de Fidel Castro fue inculcada desde el nacimiento de la actual generación de la isla, por lo que para ellos no hay más prensa que la oficial ni otra realidad que la que se les vendió, por lo que un cambio de hombre en el poder no representa prácticamente nada.