La Justicia boliviana decidió enviar a la ex presidenta interina Jeanine Áñez y a sus exministros Álvaro Coímbra, de Justicia, y Rodrigo Guzmán, de Energía, a prisión preventiva durante cuatro meses por el caso conocido como «golpe de Estado», en que impulsaron la salida del ex presidente Evo Morales en 2019.
«Me envían 4 meses detenida para esperar el juicio por un ‘golpe’ que nunca ocurrió», afirmó Áñez en Twitter, tras escuchar la resolución de la jueza Regina Santa Cruz, en una audiencia cautelar que se desarrolló por una plataforma tecnológica.
La Fiscalía realizó la solicitud de detención preventiva por el «riesgo de fuga» de los tres, acusados de «sedición, terrorismo y conspiración» en la crisis de 2019 a raíz de las fallidas elecciones que derivó en la renuncia de Evo Morales a la Presidencia de Bolivia. La Fiscalía de Bolivia había pedido este domingo 6 meses de cárcel preventiva.
Tres fiscales firmaron la imputación para la aplicación «de medidas cautelares consistente en la detención preventiva […] por el tiempo de seis meses» en cárceles de La Paz, dice el documento divulgado este domingo.
La ex mandataria, detenida desde el sábado en un cuartel policial, a la espera de que un juez resuelva su causa, señaló en un breve contacto con la prensa que «se menoscaba nuestro estado de derecho» y advirtió que de esta manera el país puede volverse «una tierra de nadie».