Los representantes de padres de familia de las escuelas particulares optarían por dejar a sus hijos en casa ante la determinación tomada por los colegios de abrir sus puertas a partir de marzo para las clases presenciales.
En entrevista con AM de Querétaro, integrantes de la mesa de jefes de familia del colegio Liceo compartieron su postura y coincidieron en que priorizarán la salud y esperarán a que al menos las personas mayores de su familia cuenten con la vacuna contra el virus de COVID-19 para tener una especie de escudo.
Paulina Arenas y Vanesa Martínez revelaron que existen dos corrientes de ideas al respecto, que pueden dividir a algunos padres, un sector requiere tener un lugar donde puedan estar seguros mientras ellos trabajan y hay quieres prefieren continuar en la modalidad a distancia.
Que se tome esta medida no hace que se disminuyan los contagios ni menos muertes. Son posturas diferentes, pero que al mismo tiempo impactan a la misma comunidad, pero lo principal como padres es la salud de ellos y de la comunidad de docentes”, dijo Arenas.
Existen papás que se tienen que ir a trabajar y les cuesta dar seguimiento a las clases virtuales, consideró Martínez.
Además de la necesidad de los niños de hacer otras actividades. El hecho de regresar a las aulas se vuelve muy complicado, en caso de contagiarse los niños, son portadores y regresan a casa donde deben convivir con otras personas”, agregó Vanesa.
Víctor Trejo, integrante de la mesa directiva de la Federación de Escuelas Particulares de Querétaro (FEPQ), dijo que las instituciones educativas requieren que las autoridades ofrezcan certeza y una fecha tentativa para el regreso a las clases físicas.
De acuerdo al semáforo de contagios, recordó, las clases se deberían reanudar cuando se encontraran en color verde, pero en el caso de Campeche, entidad que permaneció en este color por algún tiempo, no hubo este retorno.
A nivel federal se han dicho cosas y al final los gobernadores echan para atrás.
El Gobierno ha sido más flexible con otros sectores, como restaurantes, bares o centros de trabajo, pero el sector educativo sigue restringido. (Hay) cierto malestar o impotencia”, expresó Trejo.
Dijo que ya cuentan con un protocolo de regreso a clases de manera escalonada para evitar que las aulas se encuentren al máximo de su capacidad y existan condiciones sanitarias adecuadas al interior de los planteles.
La directora de Servicios de Salud de la entidad, Martina Pérez Rendón, hizo énfasis en que las escuelas no están consideradas en el escenario que se encuentra la entidad de acuerdo al comportamiento de la pandemia.
Fuente: Excélsior