Entre el 80% y 90% de los medicamentos consumidos en México, son genéricos y similares, convirtiéndose nuestro país en el segundo consumidor de estos fármacos en el hemisferio, después de Brasil, revela un estudio del Instituto Belisario Domínguez (IBD) del Senado.
Menciona que la consultoría especializada en la industria de salud IQVIA, estima que nueve de cada diez medicamentos que se venden en México son genéricos, mientras que la Asociación Nacional de Fabricantes de Medicamentos (ANAFAM) señala que son ocho de cada diez, dentro de un mercado donde se comercializan anualmente alrededor de 3 mil 200 millones de unidades.
Detalla que al ser México uno de los países con mayor penetración de genéricos a nivel mundial, los cambios legislativos que tuvieron que realizarse para la implementación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) tuvieron que conciliar posturas entre la industria farmacéutica y las agrupaciones de productores de genéricos.
El estudio titulado “La cuestión de las patentes en el Tratado México-Estados Unidos-Canadá: ¿un obstáculo para el desarrollo de medicamentos genéricos en México?”, elaborado por Ernesto David Orozco destaca que el uso de genéricos es fundamental para la salud de los mexicanos.
El documento apunta que, a nivel regional, México es el segundo mercado más grande de América Latina en la industria farmacéutica y es un importante productor de medicinas de alta tecnología, incluyendo antibióticos, antinflamatorios y tratamientos contra el cáncer, entre otros.
De las 15 principales empresas a nivel internacional, 14 tienen presencia en el país, por lo que se ha posicionado como uno de los principales centros manufactureros del sector a nivel mundial.
En términos económicos, la industria farmacéutica representa en promedio 1.2% del PIB nacional y 7.2% del PIB manufacturero, refiere el estudio.
La investigación del IBD concluye que el T-MEC no representa por sí mismo un obstáculo para la producción de genéricos y son las legislaciones nacionales las que pueden aumentar o reducir los periodos y/o criterios de protección.
En ese sentido, sostiene que la Ley Federal de Protección a la Propiedad Industrial no supone un obstáculo para el desarrollo de medicamentos genéricos, aunque todavía hay algunos temas pendientes, entre los que se encuentran modificaciones a los reglamentos de Insumos para la Salud y de procedimientos de notificación y audiencia.
Fuente: Excélsior