Estrenada en 2018 en YouTube Red, ‘Cobra Kai’ consiguió una segunda ola de popularidad mucho mayor que la primera cuando sus dos primeras temporadas llegaron a Netflix este pasado mes de agosto. La buena noticia adicional para sus seguidores es que la tercera tanda de episodios iba a tardar poco en llegar y finalmente ha sido este viernes 1 de enero cuando ha tenido lugar su estreno.
Secuela televisiva de la franquicia cinematográfica ‘Karate Kid’, ‘Cobra Kai’ demostró tener muy claras las ideas en su primera temporada para luego seguir siendo entretenida pero algo más difusa en la segunda. Habiendo visto los cinco primeros episodios de la tercera, he de decir que mantiene más la línea de la segunda, sabiendo conservar todo el encanto de la serie, pero también haciendo gala de sus debilidades cuando se deja llevar por ciertos excesos dramáticos.
Esta temporada 3 de ‘Cobra Kai’ parece querer seguir la línea de ‘Karate Kid III: El desafío final’ en lo concerniente a convertir a Kreese en un villano ya alejado de toda humanidad para ser ya una especie de exaltación del mal que lleva a la serie a caer en un desequilibrio dramático del que ya hizo gala en la segunda entrega.
Sin embargo, el personaje interpretado por Martin Kove aún podía jugar un poco al despiste entonces, mientras que aquí ya va a cara descubierta, exaltando así las diferencias entre los personajes. Ya en la segunda temporada se volvía un poco redundante en lo referente a las rivalidades entre diferentes dúos y eso es algo que, al menos por ahora, se mantiene y lleva aún más allá.
No niego que los responsables de ‘Cobra Kai’ sepan cómo hacer que eso sea entretenido a su manera, pero yo disfruto más de la serie cuando potencia su lado más humano, incluyendo su eficaz aproximación a ‘Karate Kid II: La historia continúa’, y ligero. Por ejemplo, William Zabka demostró un gran dominio del humor en la primera entrega y aquí vuelve a brillar especialmente cuando eso sucede -muy divertidos algunos de sus peculiares intentos por ayudar a Miguel-. Y también cuando comparte plano con Ralph Macchio.
Y es que la serie juega en todo momento la carta de que no son tan distintos como ellos mismos pretenden, habiendo tenido diferentes acercamientos a lo largo de las dos primeras temporadas que demuestran la buena química que tienen ambos personajes. Aquí vuelve a incidir en ello, quedando claro que, antes o después, están condenados a entenderse. Y esa rivalidad desde una amistad o al menos cierta confianza puede dar mucho de sí.
No obstante, por ahora todo ha girado más alrededor de lidiar con las consecuencias de la batalla campal que tenía lugar en el instituto al final de la segunda temporada. Ahí da la sensación de querer estirarlo todo un poco de más -mi sospecha es que la segunda y la tercera temporada funcionarían mejor habiendo comprimido todo lo que cuentan en una única tanda de capítulos-, pero por ahora al menos se hace siguiendo cierta lógica en lugar de potenciar los excesos o los cambios de motivación poco creíbles de los personajes.
Más allá de eso, esta tercera temporada de ‘Cobra Kai’ también juega a su manera la carta de la nostalgia cuando algún regreso de personajes de la franquicia que no desvelaré y que están integrados en la historia de forma bastante lógica. Bueno, salvo uno de ellos en los que se echa mano de una casualidad demasiado improbable para cerrar la línea argumental que había dado pie a la aparición de todos los demás.
La tercera temporada de ‘Cobra Kai’ se queda algo más cerca del nivel de la segunda, donde todo estaba muy bien pensado y desarrollado en lo argumental, que de la primera, pero sigue siendo un buen pasatiempo, sobre todo cuando apuesta por el humor, sabiendo además rendir homenaje a la segunda entrega de la saga cinematográfica.
Fuente: https://www.espinof.com/