El Pleno de la Cámara de Diputados reprobó la Cuenta Pública del 2018 correspondiente al último año del sexenio del presidente Enrique Peña Nieto, debido a diversas irregularidades que se encontraron, así como porque no se logró una mejoría en la calidad de vida de los ciudadanos.
En el dictamen, que fue aprobado por 400 votos a favor, 48 en contra y 8 abstenciones, se señala que, en el último año de gobierno de Enrique Peña Nieto, los ingresos públicos presupuestarios ascendieron a 5,115,011.1 millones de pesos, cifra superior en 336,819.6 millones de pesos respecto a lo estimado en la Ley de Ingresos de la Federación.
“En lo general, se estima que durante el ejercicio 2018 no se cumplieron los objetivos del desarrollo nacional, ni se logró una mejoría significativa en la calidad de vida de los ciudadanos. La evolución sexenal de los indicadores de pobreza, desigualdad, competitividad, violencia, informalidad y precariedad laboral, así como el acceso a servicios públicos de calidad, apuntan a que el desempeño del gobierno federal no priorizó de manera efectiva el bienestar de la población”, define uno de los resolutivos del dictamen.
Los legisladores criticaron que la Oficina de la Presidencia de la República registró una erogación de más del doble de lo aprobado, pues se contemplaron mil 797 millones de pesos y se ejercieron 3 mil 682 millones.
“El último sexenio fue el más alto en corrupción en México, la Cuenta Pública de 2018, es la última fotografía del modelo neoliberal, y con la actual administración se cierra dicho ciclo”, dijo el coordinador del Partido del Trabajo, Reginaldo Sandoval.
Con dicho rechazo, la Auditoría Superior de la Federación deberá dar seguimiento a las observaciones, para continuar con el proceso jurídico de responsabilidades.