A pesar de las medidas de distanciamiento y el uso de cubrebocas y gel antibacterial, es inevitable estar expuesto al salir de casa para cumplir con ciertas labores ya sea de manera diaria o esporádica. Por ello, te explicamos, cuáles son el tipo de pruebas que actualmente existen y cuál debes realizarte si sospechas que te has contagiado o tuviste contacto con alguien positivo.
Lo primero es realizar un conteo de días desde el último momento que tuviste contacto con esa persona y a partir de ahí determinar qué tipo de prueba realizar.
La mejor prueba es la de PCR, es altamente confiable y es capaz de detectar el virus SARS-CoV-2, durante los 10 primeros días de haber contraído la infección. A lo largo de esos mismos días guárdate en casa, no salgas aun cuando los síntomas sean mínimos o nulos.
Los síntomas más comunes son tos, fiebre, dolor torácico, de cabeza y dificultad para respirar, sin embargo, puedes presentar solamente uno, dos, todos o ninguno; sin embargo, siempre debes estar alerta, más si sabes que has estado expuesto al virus y un contacto directo te lo ha corroborado.
Las conocidas como pruebas rápidas para coronavirus (prueba de antígenos o anticuerpos IgG/ IgM) también son confiables, sin embargo, su funcionamiento es distinto y requiere que sea aplicada por un profesional. Los anticuerpos se detectan de 8 a 10 días después de inicio de la infección, la prueba de antígenos se recomienda para personas con síntomas sugestivos de COVID-19.
También este tipo de pruebas, en especial la de IgG SARS-CoV-2 se recomienda realizar a los 25 a 30 días después de contraer el virus para saber el nivel de anticuerpos que se generó, el cual varía respecto a la respuesta inmunológica de cada persona.
Entre más alto el nivel, menos riesgo de reinfección.