David Colmares Páramo, Auditor Superior de la Federación, presentó hoy a la Cámara de Diputados la revisión de la Cuenta Pública de 2019, el primero de la administración federal del Presidente Andrés Manuel López Obrador, e informó que se detectó un monto de 25 mil millones de pesos que son susceptibles a aclaraciones por las entidades fiscalizadas.
“Se determinó un monto observado de 25 mil 748 millones de pesos a las entidades fiscalizadas, de los cuales se recuperaron ya 738 millones, es decir, las entidades fiscalizadas entregaron ya esos recursos. De los 25 mil restantes fueron montos que son susceptibles a aclararse por las entidades fiscalizadas”, puntualizó el funcionario.
«El monto total observado es de 14 mil 47 millones; es decir, el 55 por ciento, correspondió a falta de documentación comprobatoria, el 8 por ciento a pagos procedentes o en exceso, el 6.5 por ciento a recursos o rendimientos no ejercidos ni entregados a la Tesofe, y el 4.9 por ciento a transferencias de recursos a otras cuentas bancarias», agregó.
Aunque no ofreció detalles por entidad fiscalizada, expuso que las que tienen más observaciones son el Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios (FORTAMUN), fondos del ramo 33 y las participaciones federales de la federación a las entidades federativas y de éstas a todos los municipios y alcaldías de la Ciudad de México.
“También el ejercicio de los recursos del FASSA (Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud), FAM (Fondo de Aportaciones Múltiples), FAETA (Fondo de Aportaciones para la Educación Tecnológica y de Adultos), expansión de la educación inicial, rama nacional de inglés, atención a la salud y medicamentos gratuitos a para la población sin seguridad social, laboral, escuelas al 100 y Seguro Popular”, agregó.
Colmenares Páramo, señaló que se entregaron los informes de 370 auditorías de 14 fondos y programas, 337 al gasto federalizado programable y 36 a la distribución de las participaciones federales.
De igual forma, indicó, se realizaron 14 auditorías a dependencias federales para verificar sus gestión como coordinadores de los fondos y programas.
El órgano fiscalizador también observó el proceso de reconstrucción por los sismos de 2017 y 2018, el Tren Guadalajara, la ampliación del Aeropuerto Internacional “Benito Juárez”, obras de la Sedena, Pemex y CFE, así como el programa de producción de SADER, fondos de desastres naturales.
El Auditor Superior reconoció hoy que la pandemia de COVID-19 influyó porque las entidades y dependencias tuvieron una «limitada capacidad de respuesta» a las solicitudes de información.
«La pandemia de COVID-19 limitó las respuestas y requerimientos de la ASF para la revisión de la Cuenta Pública 2019 en todos los niveles de gobiernos federal, estatal y municipal; sin embargo, la ASF no se detuvo y creó herramientas para cumplir su labor», expuso este año.
Fuente: La Razón