El ex primer ministro italiano y dueño del imperio mediático Mediaset, Silvio Berlusconi, ha sido ingresado en el hospital San Raffaele de Milán después de dar positivo por coronavirus y agravarse lo que en un principio se consideraron síntomas leves. Pasada la medianoche, su médico personal decidió que fuese trasladado a un centro médico, donde entró por su propio pie y no necesitó pasar a la UCI. “Tras la aparición de algunos síntomas, el presidente Berlusconi ha sido ingresado por precaución. El cuadro clínico no es preocupante”, señaló su médico. Su historial cínico y su avanzada edad (83 años), sin embargo, aumentan el riesgo y su entorno ha comunicado esta mañana que padecería un principio de pulmonía bilateral.
El empresario anunció el miércoles que había contraído el virus, probablemente en Cerdeña, donde se produjo uno de los focos de contagio este verano en Italia. El líder de Forza Italia abandonó su lujosa villa en la isla el 19 de agosto, donde había celebrado una fiesta y recibió también la visita del empresario Flavio Briatore, que resultó positivo días después. El excavaliere regresó a su residencia de Arcore, en Lombardía, y tras conocer el positivo de su amigo Briatore, se sometió a un test serológico y dio negativo. No está claro el origen del contagio, porque días después viajó a la Costa Azul, donde vive su hija mayor Marina, y a su regreso dio positivo.
La familia directa de Berlusconi, sus dos hijos pequeños y su nueva novia, la diputada de 30 años Marta Fascina, también se han contagiado y se encuentran en régimen de aislamiento en la mansión de Arcore. Todos eran asintomáticos, como el propio Berlusconi, que había afirmado este jueves que se encontraba bien y que continuaba trabajando. “Quiero asegurar que estoy bien. Yo también soy víctima como tantos italianos del contagio por covid. Una enfermedad de la que nunca hemos apreciado la importancia ni los riesgos que conlleva y la consecuente necesidad de medidas más rigurosas en la tutela de la salud pública”, escribió Berlusconi en Twitter.
Los síntomas, sin embargo, se agravaron este jueves por la noche y fue ingresado en el hospital San Raffaele, donde también trabaja su médico personal, Alberto Zangrillo. El exmandatario no ha necesitado que le trasladaran a la UCI, pero su estado se monitoriza con mucha atención dada su avanzada edad y sus antecedentes coronarios.
Fuente: El País