Las remesas que reciben en México l.8 millones de familias sumaron 3,531 millones de dólares en julio, una cifra que refleja un aumento de 7.2% anual, informó el Banco de México.
La entrada de los llamados migradólares sigue sorprendiendo a los analistas, ante la destrucción de empleos que se presentó en marzo al iniciar el confinamiento en Estados Unidos y España que son los principales originadores de remesas, revelaron estrategas de Goldman Sachs y Credit Suisse.
En el acumulado del año, esto es de enero a julio de 2020, los hogares mexicanos receptores de estos recursos han captado 22,821 millones de dólares, una cifra que incorpora una variación de 10.1 respecto de los envíos registrados en los mismos siete meses del año anterior.
La información del Banxico en julio muestra que la remesa promedio que captaron en el país las familias receptoras fue de 343 dólares. Giros que ingresaron en 10.2 millones de operaciones.
El Gerente de Estadísticas Económicas en el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA), Jesús Cervantes, fue el primero en identificar desde abril, que la solidez de estos giros podía estar vinculada a los estímulos fiscales que estaban recibiendo en Estados Unidos los trabajadores mexicanos que ya cuentan con la residencia.
Para el mes de mayo, el experto argumentó que la fluidez de los envíos respecto de las caídas de las remesas hacia América Latina, podía estar explicada también por el hecho de que los trabajadores en EU estaban recibiendo un doble apoyo fiscal en efectivo, uno federal y otro del estado de residencia.
El economista en jefe para América Latina en Credit Suisse, Alonso Cervera, consignó que este sorprendente incremento resulta a su vez del aumento en el número de transferencias (5.8%) y del valor promedio de las mismas.
De hecho, Alberto Ramos, economista para América Latina en Goldman Sachs, estimó que la depreciación de 15.2% que observó el peso mexicano contra el dólar en julio, favoreció al poder adquisitivo de los giros recibidos en México. Así que al pasarles el filtro cambiario, cada hogar que captó remesas percibió un rendimiento de 22% en moneda local en términos reales, esto es descontando inflación. Esto, porque los hogares receptores cambian los dólares de las remesas por pesos, que es como gastan en el país.
El mes pasado, el analista senior de Ducker Frontier, Alejandro Valerio, sostuvo que los apoyos en efectivo recibidos por los mexicanos con ciudadanía de Estados Unidos, eran incluso mayores a su percepción mensual cuando eran trabajadores en activo, lo que permitía suponer que estaban compartiendo con sus familias en México.
Recordó que en tiempos de crisis en México, los trabajadores originadores de remesas suelen enviar mayores giros a sus familias en el país.
En diversos análisis, estrategas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) han demostrado que en tiempos de crisis económicas en los países de origen, los trabajadores migrantes hacen mayores esfuerzos para apoyarles con remesas.
Fuente: El Economista