India superó este lunes los seis millones de casos registrados oficialmente de nuevo coronavirus y se acerca a todo vapor a Estados Unidos, país con más infectados en el mundo, según cifras del ministerio de Salud.
Con 6.1 millones de contagios, India podría superar en las próximas semanas a Estados Unidos (con 7.2 millones de casos de Covid-19).
India es uno de los países que más preocupan a los expertos, debido a su gran población -1,300 millones de personas- y al hecho de que tiene algunas de las ciudades más densamente pobladas del mundo, con un sistema de salud frágil.
El país está registrando oficialmente entre 80,000 y 90,000 nuevos casos cada día, los mayores aumentos del mundo desde hace varias semanas.
En lo que respecta a los fallecimientos, India tiene una tasa mucho más baja que otros países y registró oficialmente casi 100,000 muertes desde el comienzo de la pandemia, mientras que Estados Unidos, con aproximadamente una cuarta parte de su población, tiene 205,000 y Brasil con 140,000 decesos.
El domingo, el primer ministro Narendra Modi pidió a la población que siga usando mascarilla en el exterior de sus casas.
Estas reglas son armas en la guerra contra el coronavirus. Son herramientas poderosas para salvar la vida de cada ciudadano», dijo Modi en su discurso mensual en la radio.
Ciudades importantes como Bombay y Delhi fueron las primeras en verse afectadas por el virus. Pero también se ha extendido a regiones y zonas rurales, donde las infraestructuras sanitarias están menos desarrolladas.
«La infección se está extendiendo en varias zonas donde la transmisión es activa», dijo a la AFP la exministra de Salud, Sujatha Rao. «Es difícil controlar la transmisión en una situación así y un cambio radical solo puede ser posible con la aplicación rigurosa de medidas de contención y de prevención, como el uso de mascarillas».
A pesar de la progresión de la epidemia, es poco probable que el gobierno decida imponer un nuevo confinamiento ya que el primero, en marzo, hundió la economía del país. Al contrario, el gobierno continúa levantando restricciones.
Algunas escuelas volvieron a abrir. Los trenes, el metro, los vuelos nacionales, los mercados y los restaurantes también pueden funcionar normalmente y el Taj Mahal reabrió sus puertas a los turistas hace una semana.
«La epidemia está bien arraigada en la población», dijo a la AFP Anand Krishnan, profesor en la estructura pública más prestigiosa del país, el All India Institute of Medical Sciences (AIIMS) en Delhi.
«Lo único que se puede hacer es cuidar de los enfermos, identificarlos más rápidamente y tratarlos mejor. Y seguir las normas de distanciamiento social», añadió.
Algunos residentes de Delhi dijeron a la AFP que su preocupación por el virus no es tan fuerte como antes.
Fuente: El Economista