La epidemia de coronavirus en México podría “demoler” la clase media que tardó décadas en construirse, señala un artículo de Los Ángeles Times.
En nuestro país, el salario promedio mensual es de 6 mil pesos. Debido a que buena parte de los trabajadores están fuera del sector formal, el gobierno define la clase de los habitantes por hábitos de gasto y otros indicadores de calidad de vida.
En 2010, el Gobierno Federal detectó que el 39 por ciento de la población pertenecía a la clase media, un aumento del 35 por ciento respecto a la década anterior.
Además, se detectó que el 59 por ciento de los mexicanos eran de “clase baja“, en contraste con el 2 por ciento de personas en la “clase alta“.
Durante esa la década de 2010, de acuerdo con el Banco Mundial, el 17 por ciento de los mexicanos se sumó a la clase media, que se definió como ganar entre 100 y mil pesos al día.
A pesar del incremento en el número de personas de clase media en México, el mayor grupo socioeconómico del país son los pobres.
Ante la epidemia de COVID-19, el presidente Andrés Manuel López Obrador optó por adoptar un modelo de austeridad en el gobierno y rechazó implementar un modelo de rescate económico para el sector empresarial.
No se da prioridad a las grandes empresas o bancos. Ahora por el bien de todos, primero se rescata al pueblo”, expresó el mandatario durante su discurso por el Segundo Informe de Gobierno.
Durante la emergencia sanitaria, en México se han perdido 12 millones de empleos y han cerrado unas 150 mil pequeñas empresas.
López Obrador insiste que lo peor de la crisis ya pasó y destacó la creación de unos 100 mil empleos formales en agosto; sin embargo, ello representa menos del 10 por ciento del total de los puestos perdidos desde el inicio de la pandemia.
Los expertos advierten que los daños económicos generados por el coronavirus permanecerán por varios años.
Creo que esto va a ser terrible en términos de creciente desigualdad”, comentó Juan Carlos Moreno-Brid, economista de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Detalló que incluso si México se recupera rápidamente, podría tomar hasta 2028 restaurar el ingreso promedio de los trabajadores a como estaba la década pasada.
A inicios de septiembre, analistas consultados por el Banco de México (Banxico) previeron una contracción en la economía nacional de 9.97 por ciento para 2020, lo que representa una ligera mejora respecto a julio, donde se estableció que el producto interno bruto caería 10.02 por ciento.
Con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá en vigor (T-MEC), puede que la integración de las economías mexicana y estadounidense se profundice en los próximos años, lo que podría ayudar a paliar la crisis económica en nuestro país.
Si hacemos las cosas bien, los volúmenes de inversión internacional realmente podrían crecer“, comentó el economista Luis de la Calle, y agregó que lo más probable es que las regiones que no dependen del turismo reflejen una recuperación económica más acelerada.
Fuente: Staff