Mientras espera que se modifique la condena de por vida, que se le imputó en Estados Unidos, el capo mexicano Joaquín el “Chapo” Guzmán pasa 23 horas aislado en una celda donde la luz siempre está encendida.
Viste un uniforme color café y camina de lado a lado, se tumba en la cama y vuelve a caminar, recrea su abogado. Tiene la mirada perdida y está más delgado. El pasado 17 de julio se cumplió un año de la sentencia a cadena perpetua del fundador del Cártel de Sinaloa. Desde entonces, está aislado en la prisión de máxima seguridad Supermax ADX Florence, en una habitación, con una ducha, un inodoro y una ventanilla en la parte superior desde la que a duras penas logra saber si es de noche o de día. La hora que le queda lo llevan a ejercitarse.
Fuera de la cárcel de Colorado (EEUU), el abogado Marc Fernich intenta repetir el juicio al capo mexicano, argumentando que algunos miembros del jurado se dejaron influir por la información que se publicó en prensa y las redes sociales.
Fernich, un abogado que se hizo con la defensa privada del narcotraficante, insiste que eso supone una violación de las condiciones establecidas y los jueces ignoraron las advertencias diarias del juez Brian Cogan, quien les dio instrucciones precisas antes y durante el juicio de que tenían que evitar por todos los medios la información que se publicaba sobre el caso.
La defensa tiene inicialmente una moción de 245 páginas ante el Segundo Circuito del Tribunal de Apelaciones para que el veredicto del juez Brian Cogan sea anulado y el capo tenga un nuevo juicio.
En el equipo de abogados que representan a Joaquín Guzmán también se encuentra William Purpura, experto en procesos de apelación. Purpura asegura que la repetición de un juicio para el Chapo es viable, luego de probarse que entre cuatro y cinco miembros del jurado leían en internet noticias sobre el narco, incluyendo testimonios de criminales diciendo que el acusado traía adolescentes de Colombia para abusar de ellas, o bien que había matado a un sinnúmero de personas.
Purpura, entrevistado por el periodista Miguel Ángel Vega, del semanario Río Doce, asegura que existe la posibilidad de que el capo mexicano tenga éxito si se celebra un nuevo juicio.
Al decir “éxito”, el defensor se refiere a que el jurado podría no comprobar muchas de las cosas de las que se le acusa al narco, por lo que la sentencia podría ser diferente.
“Si el juicio se repite, ¿confía que Guzmán Loera tenga un juicio justo?”, pregunta el periodista Miguel Ángel Vega al letrado.
—Es muy difícil que un acusado como el “Chapo» tenga un juicio justo, especialmente en Nueva York y sobre todo en Brooklyn, pero confío que así sea, y que el juez no sea el mismo y que la corte sea diferente. Si eso ocurre, es posible que Guzmán Loera tenga muchas posibilidades de tener éxito durante un nuevo juicio”, asegura Purpura a Río Doce.
En la tierra de Joaquín el “Chapo” Guzmán, Badiraguato, Sinaloa, dicen desconocer qué ocurre con el juicio, y sólo viven esperanzados a que un milagro ocurra para que el fundador del Cártel de Sinaloa reciba un juicio justo en EEUU.
Armida Guzmán, hermana del Chapo, entrevistada por Miguel ángel Vega, confía en que Dios lo va ayudar, “mantenemos nuestras plegarias de oración para que así sea, porque a estas alturas, sólo Dios puede ayudarlo”, mencionó al periodista.
Con esa misma fe, los habitantes de la Tuna esperan el regreso del Chapo.
El juicio a Guzmán Loera fue un bombardeo masivo de información. Las pruebas presentadas ocuparon más de 5,2 gigas de memoria, Incluyeron cientos de fotos, audios, videos, mensajes y documentos que tuvo que digerir el jurado antes de declararlo culpable de 10 cargos que se le imputaban.
Fuente: Infobae