El Instituto Nacional Electoral (INE) solicitará 20 mil 464 millones de pesos para el presupuesto de 2021, lo que representa un incremento de 5.5 por ciento a lo recibido este año y que se deriva de los gastos extraordinarios que implica la pandemia de covid-19, el crecimiento de la lista nominal y la renovación del Sistema Integral de Verificación y Monitoreo.
“El monto a solicitar en 2021 será de 20 mil 464 millones de pesos, esto se divide en el presupuesto base del instituto que abarca 10 mil 992.9 millones que es el presupuesto ordinario de operación y una cartera institucional de proyectos que necesitamos adicional por las elecciones que son 9 mil 471.9 millones”, informó en conferencia virtual el consejero Ciro Murayama.
Sostuvo que el proyecto presupuestal es muy responsable y racional, pues incluso a pesar de tratarse de la elección más grande de la historia, el costo por elector pasará de 91.07 pesos en 2018 a 86.36 pesos para la elección del próximo año.
El principal gasto, dijo, es para garantizar casillas sin contagios, pues el grupo de médicos expertos recomendó que aunque es incierto el desarrollo de la pandemia para el próximo año, lo mejor es tomar las mismas medidas que se consideran para las elecciones de Hidalgo y Coahuila en octubre de este año.
El costo del equipo de desinfección para las casillas asciende a 311 millones 164 mil 50 pesos, un costo de mil 891 pesos por casilla en las que los funcionarios contarán con gel antibacterial, cubrebocas, careta, toallitas desinfectantes, aerosol desinfectante, coro, atomizadores, cinta para señalar las divisiones de las casillas y el espacio que deberán ocupar los votantes, así como la renta de una mesa adicional para garantizar la sana distancia.
Además de 15 millones 500 mil pesos para el mismo equipo que se entregará a los CAEs y supervisores.
Otro rubro que forma parte del incremento necesario para el próximo año son los 345.6 millones de pesos para la renovación tecnológica del Sistema Integral de Verificación y Monitoreo que debió actualizarse desde el año pasado.
El consejero advirtió que de no aprobarse este dinero “se va a poner en riesgo la capacidad de monitoreo del Estado mexicano, sería muy grave que soslayar esta necesidad fuera generando un problema que pudiera estallar de cara al proceso electoral 23-24 donde se renueva la presidencia de la República; garantiza que las campañas se estén realizando en condiciones de equidad en materia de radio y difusión”.
Agregó que en total son mil 285 millones 800 mil pesos los que se solicitan de manera adicional. Recalcó que si no hubiera crecido la lista nominal, si no se requirieran gastos extraordinarios por la pandemia de covid-19 y no fuera necesaria la renovación del sistema de monitoreo el presupuesto que habrían solicitado sería de 19 mil 179 millones de pesos.
Aclaró que además se contempla un congelamiento de salarios, con excepción de las personas que menos ganan que tendrán un aumento del 1.5 por ciento real. Por lo que insistió en que se trata de un presupuesto “ya ajustado y recortado”, por lo que acudirán a la Cámara de Diputados “a efecto de explicar hasta la saciedad la propuesta presupuestal” y la necesidad de que no sea ajustado.
“El margen de maniobra está muy reducido, hay derechos fundamentales que no se pueden poner en riesgo no puede ser que por cuestiones presupuestales no haya una casilla para los ciudadanos puedan ejercer el voto, a esta enorme elección que la demografía ha hecho grande pero también los acuerdos políticos de hacer coincidir las elecciones para generar ahorros y no tener tanto proceso electoral disperso, este derecho al voto no puede ponerse en riesgo y no es incompatible con derecho a la salud, la democracia tiene que ser parte de la nueva normalidad, lo anormal sería que por la pandemia empecemos a obstruir los derechos políticos de la ciudadanía.
“No sería irresponsable que el Estado mexicano vaya a una elección en la que en aras de ahorro ponga en riesgo el derecho electoral y el derecho a la salud”, concluyó.
Fuente: Milenio