La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, reconoció que se han dado algunas fricciones entre los gobiernos estatales y la federación, pero aclaró que no es significado de un rompimiento, sino de un trabajo conjunto.
En el marco de la reunión virtual semanal entre integrantes de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) y autoridades federales, Sánchez Cordero afirmó que la nueva normalidad requiere de toma de decisiones complejas.
“La nueva normalidad requiere de toma de decisiones complejas, porque compleja es la realidad que le es inherente. Es importante recordar el momento que requiere de mucha colaboración entre la federación y los gobiernos locales, lo que pudo generar en su momento ciertas fricciones naturales, pero jamás un rompimiento entre los esfuerzos que hemos estado consolidando», refirió.
Sánchez Cordero, dijo que es necesario afinar los puntos donde se han tenido diferencias, con el objetivo de lograr el consenso para tener buenos resultados.
“Tuvimos una reunión el lunes donde planteamos diferentes acciones con las que consideramos será posible considerar una nueva etapa de colaboración, que se perfila como uno de mayores desafíos en la historia reciente de la humanidad”, dijo.
Entre las acciones está la creación de mesas técnicas que tendrán como sede la Comisión Nacional de Salud (Conase), en donde se atenderían diferentes temas como la gobernabilidad y todo lo enfocado en el tema de salud, donde tendrán participación todos los gobiernos.
Además, las mesas servirían para plantear modificaciones a los aspectos cualitativos del semáforo preventivo, con la finalidad de ajustarlo a la realidad económica y sanitaria de cada entidad.
Con ello, se puede discutir pasar de una naturaleza obligatoria del semáforo a otra que pudiera resultar a que estuviera orientada a lo indicativo.
“Puede ser también que el semáforo funcione de manera estatal o regional, lo que promovería la cooperación entre entidades para coordinar el color del semáforo”.
Fuente: La Razón