Las cortinas de humo siguen rodeando Palacio Nacional y la nueva realidad de los mexicanos. El covid-19 sigue en el país, continuamos en semáforo rojo y sin embargo para decenas de personas parece que ya pasó la pandemia.
Ya se cuentan miles de muertos, justo cuando la Ciudad de México está probando el retomar actividades. Siguen las restricciones, aunque no quiere decir que los ciudadanos hagan caso.
Añadido a la que llamaron como la “Nueva normalidad”, caemos en círculos peligrosos de distracción. Por ejemplo, que Andrés Manuel López Obrador destape un presunto fraude de factureras al Servicio de Administración Tributaria (SAT) por 48 mil millones de pesos.
¿Lo necesitábamos? Pues claro que no, pero el presidente sí para desviar la atención de la mala planeación para enfrentar la pandemia.
Además, López Obrador tiene a sus “olvidados”, de quienes ya nadie habla, pero que están ahí: Niños con cáncer enfrentando una penosa carencia de medicamentos.
En las redes no vemos que funcionarios hablen de todos ellos, o ¿podrían mencionar a alguien de la política que haya tenido una sola muestra de solidaridad con los niños mexicanos que tienen cáncer y sufren por la falta de medicina?
Y eso es lo verdaderamente relevante ahora, en plena mitad de un tragicómico 2020. Pero al señor López le importan más los distractores, o algo más, si es que algo le importa.
La misma Secretaría de Salud ha dicho que sí se han comprado medicamentos, pero que eso no asegura el abasto suficiente y adecuado para tratar a los pacientes oncológicos infantiles.
Incluso el pasado 11 de junio había algo de esperanza cuando en una reunión con padres de familia de estos niños la secretaría iba a firmar un acuerdo que garantizara el abasto de las medicinas, pero al final, la dependencia dijo que no se podía comprometer… ¿perdón?
Padres de niños con cáncer en México siguen a la espera de una solución clara ante el problema de falta de medicamentos oncológicos.
La situación sigue igual, entrampada, los niños siguen sin medicamentos, sin solución, oh, pero vamos, ya fue a limpiar las botas de su homólogo estadounidense, no perdón, a celebrar una “importantísima” visita de Estado.
La secretaría de Salud, asegura que a nivel internacional existe un desabastecimiento de medicamentos oncológicos y es esa la razón por la que algunos de los fármacos no han llegado al país. Pero, ¡por favor! La adquisición de medicamentos oncológicos no es fácil, pero es una mentira que sea a nivel mundial, cuando sólo se trata de la ineptitud de un sistema de salud roto.
Aletia Molina
@AletiaMolina