Ante diputados, la titular del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Raquel Buenrostro, aseguró que pese al Covid-19 no ha caído la recaudación de impuestos, y destacó que tras meses de litigio, en cuestión de “minutos” el gobierno logró que grandes empresarios se pusieran al corriente.
Aseguró que eso ha sido posible gracias a una política de tratar directamente con los empresarios, y no con los despachos contables que litigan en contra del pago de impuestos, para enriquecerse.
La semana pasada el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que Walmart pagó 8 mil 079 millones de pesos en impuestos, FEMSA reconoció deuda por 8 mil 790 millones de pesos con Hacienda, e IBM “se puso al corriente” con un pago por 699 millones de pesos de gravámenes pendientes. En total, 17 mil 568 millones de pesos.
La funcionaria expuso que hay despachos que se dedican a aplicar ante el SAT mecanismos de defraudación para darle la vuelta a la ley, y es por eso que los litigios se prolongan.
”Cuando deja de venir el que inventó el mecanismo de defraudación fiscal” y acude al SAT el presidente de un consejo de administración, “es en automático” que entienden por qué deben pagar y ha habido ejemplos en los que basta “en reunión de 40 minutos para que dijeran tienen razón, voy a pagar”.
Hoy Buenrostro se reunió virtualmente con la mesa directiva de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, en donde aseguró que los ingresos tributarios crecieron en 2% con relación a enero-abril de 2019 y 2.5% si se consideran ingresos por los fideicomisos a extinguir, según decreto presidencial de abril.
Ahí la funcionaria dijo que la estrategia del SAT ha sido centrarse en los grandes contribuyentes. Sostuvo que no hay privilegios para nadie pero tampoco persecución.
Aseguró que el SAT ha actuado con “cero privilegios y cero condonaciones” y tampoco hay terrorismo fiscal, pues “la gente está cumpliendo. Los que se sienten amenazados y presionados son los incumplidos”.
En la reunión se le inquirió sobre la propuesta de Morena para que colabore con el Instituto Nacional de Geografía (Inegi) en medir la riqueza y gravarla progresivamente, pero no respondió.
El diputado Antonio Ortega (PRD) le cuestionó sobre los señalamientos de terrorismo fiscal y persecución, y auguró que ahora con la pandemia de Covid-19 deberá de “sacar dinero hasta de las piedras” por lo que esa política podría recrudecerse.
Las proyecciones de los criterios económicos han sido rebasadas “hay déficit de 85 mil millones de pesos, un crecimiento del 2%; la crisis sanitaria los ha hecho pedazos y estamos hablando ahora de una caída del PIB cercana al 7-8 por ciento -algunos pesimistas hablan del 12 por ciento- por lo que la caída de los ingresos tributarios se podrían presumir cercanos a los 400 mil millones de pesos” en el futuro.
Planteó a la funcionaria ponerse en los zapatos de pequeños y medianos empresarios e inversionistas para que considerara nuevos esquemas de pagos fiscales.
Por Morena, el diputado Carol Antonio Altamirano aseguró que la recaudación de ISR en abril de 2020 mostró una disminución de 26.2 por ciento, respecto del mismo mes de 2019, lo cual podría ser un efecto de la crisis por el Covid-19.
Hay algunas cifras preocupantes, dijo, por lo que pidió una estrategia para financiar la salida de la pandemia.
Fuente: El Universal